Precio...

El día en el que alejé todas mis preocupaciones a un lado y todas mis alegrías al otro fue cuando me di cuenta de que nunca debería haberme dado cuenta, fue el día en el que me mate a mi mismo y vi la verdad, cuando me percate de la realidad y no pude seguir viviendo sin tenerla presente...

Desde ese día los regalos no son mas que bienes materiales, las desgracias no son mas que simples hechos insignificantes, los manjares no son mas que proteínas e hidratos de carbono, los secretos no son mas que palabras, las personas no son mas que títeres programados, las lágrimas no son mas que liquido de la glándula lagrimal, las sonrisas no son mas que movimientos faciales, los abrazos no son mas que contacto físico...

Todo cuanto nos preocupa no es mas que una sensación de inseguridad que no nos deja pensar con claridad, no es mas que un conjunto de hechos futuros que llegará de una manera u otra, cosas inalterables que finalmente acabaran ocurriendo y que nos obligarán a sufrir.

Vamos de cabeza dándole vueltas mientras no nos percatamos de lo que ocurre a nuestro alrededor, mientras nos encontramos indefensos ante nuevos problemas.
Cuando apartas todas estas innecesarias preocupaciones y dejas tu mente vacía solo nos queda la paz, solo tenemos que pensar como deshacernos de ellas y mantenernos en este estado de tranquilidad.

En realidad nada existe, todo es relativo, efímero, transparente e inexistente. Cada cosa tiene el valor que tu quieras darle, y dependiendo del valor que tu le des y como lo expongas ante otros es en lo que finalmente se convertirá, es en lo que acabara convirtiéndose, pero no en realidad, si no a vuestros ojos...

No veo las conversaciones como herramientas de información al prójimo, solo son palabras que fluyen en la dirección que uno elige, conjuntos de palabras y emociones falsas o verdaderas que nos llevan a decir lo que debemos y lo que no debemos.

Nos preocupamos por hablar cuando realmente debemos escuchar. Quien habla solo comparte pero no obtiene, pero quien obtiene y no comparte se enriquece y quienes están a su alrededor se percatan. No somos capaces de guardar tales riquezas sin que los demás se den cuenta, no somos capaces de compartir mentiras para así proteger verdades...

¿Alguna vez os habéis preguntado porque tenemos dos orejas pero solo una boca?
Pues por que hay que escuchar el doble de lo que se habla, por que no se aprende hablando si no escuchando.

No nos queremos dar cuenta pero todo se puede arreglar con un chasquido de dedos, todo se puede hacer poniéndose de cara a quien sea necesario y diciendo lo que haga falta a la cara.

Cuando aprendes a ver tanto lo bueno como lo malo como hechos que fluyen y que siguen un camino lógico es cuando aprendes a anticiparte a los sucesos, y cuando aprendes a ver como ven los demás es cuando aprendes a anticiparte a las anticipaciones.

Coge todos tus problemas y colócalos sobre un tablero de ajedrez, después coge los problemas ajenos y pósalos al otro lado del tablero. Estúdiate las reglas, aprende como se mueve cada ficha, aprende como mata cada uno, aprende que casillas no pueden alcanzar, mezcla todo con todo y empieza a jugar. Para cuando quieras darte cuenta tus problemas ya no serán tuyos, serán de los demás...

[#376] El precio de reír es el mismo que el de llorar, solo hay que decidirse y hacerlo...